No hay duda alguna en que Astell&Kern es de las marcas líderes en el sector del audio portátil, tanto por repercusión de sus lanzamientos y novedades, como por toda la comunidad de fans que tiene tras ella. No obstante también despierta una cierta crítica, debida sobre todo a los altos precios asociados a prácticamente todos sus modelos.

Atendiendo a esta última frase, el A&Ultima SP1000, que así es como la compañía surcoreana denomina al nuevo «flagship», se torna como un DAP de altas ligas, que desde luego no es para todos los bolsillos, y parte de este sector crítico no encajará con buenos ojos los 3.599 euros de PVP para el mercado español. Si estás entre ellos probablemente esta review no tenga interés para ti, o sí. Aunque luego también existen relojes de varias decenas de miles…¿no?

https://www.astellnkern.com/eng/content/shop/subMain.asp?mcg=CG110000&mpos=0

Aunque lo parezca el SP1000 no es el sustituto directo del AK380 que también analicé aquí hace unos meses. De hecho comparando ambas versiones «copper» el SP1000 es incluso hasta más barato.

Este nuevo DAP tiene más pantalla, más resolución y más potencia que el AK380, por lo que en términos prácticos no creo que nadie tenga dudas por cuál decantarse…

Diseño y presentación

Astell&Kern tiene una concepción de producto que abarca hasta el más mínimo detalle. En muchos aspectos me recuerdan a Apple, ya que nada parece estar descuidado, desde la serigrafía del manual, hasta el orden de presentación de los distintos accesorios.

El SP1000 convierte la experiencia «unboxing» en casi un ritual. El DAP viene protegido por una bonita caja de madera natural, al más puro estilo reloj suizo de altos vuelos, y ya desde un comienzo uno empieza a notar que está ante algo más que un reproductor de música; es todo el conjunto el que describe perfectamente la palabra lujo.

Como no podría ser menos por el precio ya nos viene incluida una funda de piel auténtica y de primera fila, para proteger de una manera estilosa al SP1000.

Hay dos acabados principales en este DAP, la versión en cobre que es la que hoy os traigo, y también la versión en acero inoxidable. Recientemente Astell&Kern ha lanzado la versión Onyx Black, que como su nombre indica es totalmente negra. Todas tienen el mismo precio.

Cada material tiene sus distintas propiedades, también frente al aislamiento de interferencias, disipación de calor, peso etc. Incluso hay usuarios que afirman distinguir leves cambios en el sonido de la versión Copper frente a la «SS» (acero inox). Pero como realmente no he tenido ocasión para hacer un cara a cara exhaustivo es algo que no puedo afirmar, y que por otro lado de haber diferencias creo que estas serían muy pequeñas.

A pesar de llevar una fina capa de antioxidante, esta versión en cobre en el tiempo que tuve el SP1000 contigo sí que presentó algunos síntomas propios de sulfato, cuando se somete al cobre a un ambiente que no es perfectamente seco. Cabe anotar que si bien no vivo pegado al mar, sí estoy en una ciudad costera, y quizás en una zona de interior estos síntomas tarden más en aparecer.

No obstante esto no es algo que los usuarios no conozcan, ya que es exactamente el mismo caso que en la versión de cobre del AK380. La propia Astell&Kern da unas indicaciones sobre cómo pulirlo para dejarlo como una patena, si el usuario quisiera.

Así que me tomaría esto más como un precio a pagar si se quiere contar con un chasis que está hecho de un bloque sólido de cobre; para quien no quiera imaginarse la idea de que su SP1000 presente esta especie de oxidación (que no es dañina puesto que simplemente es en la capa superficial), debería optar por la nueva versión Onyx Black o por la «SS».

El SP1000 es grande, muy grande. Con unas medidas de 13,2cm(alto) x 7,5cm (ancho) x 1,6cm(grosor) más que portátil lo definiría como transportable. No es el típico reproductor que quieras llevar en la mano durante tus paseos, ni siquiera en el bolsillo del pantalón, ya que sus formas angulosas y su alto peso lo harán incómodo y tendrás la sensación de llevar un gran lastre.

Si a esto le juntamos el alto precio tenemos un DAP al que no apetece demasiado sacar de casa o de la oficina; o al menos así fue mi caso durante el tiempo que lo tuve en pruebas; directamente me daba demasiado reparo el que sufriera una caída o simplemente un arañazo con alguna cremallera.

Esta versión Copper pesa 1g más que la de acero, para hacer un total de casi 388g, un peso considerable y que por un lado resulta un hándicap para su portabilidad, pero a su vez hace que el conjunto se sienta muy sólido, transmite unas sensaciones formidables en la mano.

Hardware & Software

La pantalla de 5 pulgadas preside el frontal, y en este caso da la sensación de extenderse bastante más hacia los bordes que anteriores modelos de Astell&Kern, al más puro estilo «bezel-less» tan presente en los smartphones de hoy en día. Esto le da una apariencia más minimalista y moderna, que particularmente encuentro muy acertada.

Varios son los apartados en los que encontramos mejoras sustanciales con respecto al AK380, la pantalla ahora cuenta con una resolución superior de 1280x720p con unos ángulos de visión mejorados también y que rozan los 180º, a pesar de no ser una pantalla AMOLED he de confesar que la representación de colores sí hace que lo parezca, los negros son muy profundos y en general los colores son muy vivos y tienen un alto contraste.

Podría decir sin temor que es la mejor pantalla que me he encontrado en un DAP, y en parte era lo que esperaba de Astell&Kern. Hay algo en la elección de la calidad del cristal que marca la diferencia, más allá de que otras marcas puedan igualar o incluso superar las cifras de resolución, es una pantalla bien calibrada.

La rueda principal cuenta ahora con un mayor protagonismo, integrando las funciones de bloqueo y apagado/encendido aparte del control de volumen, además luce espectacular gracias a un bonito mecanizado que recuerda a la hélice de un barco. Esto todo facilita un poco el manejo a una sola mano, aunque por las grandes dimensiones de este reproductor más bien este aspecto quedará limitado a los que sois de manos generosas.

Astell&Kern sigue confiando en AKM como elección para su chip DAC, y cada vez son más las marcas de gama alta que apuestan por ellos. Esta vez en su versión 4497EQ, un modelo muy evolucionado y creado desde cero con la mayor calidad de sonido en mente, ahora incorpora un filtro por condensador («OSR Doubler») que consigue abarcar un amplio rango de frecuencias. El soporte para DSD lo hace de manera nativa, y es sin duda uno de los chip DAC más destacados del mercado actual; y en general se distingue por ofrecer un sonido menos «digitalizado» que los Sabre.

Los reproductores de esta marca nunca tuvieron su punto fuerte en la potencia, pero el SP1000 es el primero que sí consigue marcar la diferencia de la salida balanceada frente a la normal, que ahora se queda cerca de duplicar el voltaje, con 3,9Vrms. A pesar de la costumbre que tiene Astell&Kern de aportar los datos de potencia sin carga asociada (algo que despista bastante), en mis pruebas he encontrado esta salida balanceada más que suficiente para mover muchos orejeros del mercado de una manera bastante solvente.

El software base es Android, al igual que el resto de modelos. Si bien la marca coreana se caracteriza por ofrecer una capa altamente customizada para que poco se parezca al que podemos encontrarnos en cualquier móvil chino de 60 euros. Esto es algo que por una parte encuentro positivo, ya que nos da unas sensaciones de exclusividad distintas. Y tampoco es una capa cualquiera, es la que mejor funciona de todos los DAPs basados en Android y de largo.

Manteniendo la línea estética del resto de la gama ha sufrido un rediseño centrando todo ahora en una pantalla de reproducción más simple e intuitiva. Desde la cual nos desplazaremos hacia el resto de menús disponibles.

Todo se basa en un tema oscuro, muy bonito, y con prácticamente cero lag, gracias al generoso procesador y la ram del SP1000. Tampoco he tenido ni un sólo cuelgue en todo el tiempo de pruebas, que ha sido largo. Si tienes manos grandes incluso es muy factible el operar con una sola mano, gracias a la rueda del volumen multifunción y a la disposición del menú.

Reconozco que no soy muy fan de utilizar Android como sistema para un DAP de altas prestaciones, pero por otro lado al tener esta capa tan bien ejecutada y sin fallos no se le puede poner ninguna pega. Además Astell&Kern da soporte a Tidal y otras aplicaciones para que podáis hacer uso del streaming.

El unboxing

Hace ya un tiempo que está disponible el vídeo «unboxing» del SP1000 en el canal de Oldnewsound, al que os animo a todos a suscribiros, si aun no lo habéis hecho.

Las especificaciones
  • Material del chasis: cobre/acero inoxidable.
  • Pantalla: LCD 5″ (1280x720p)
  • Soporte de archivos: hasta DSD256 (1bit/11,2Mhz)
  • Potencia (sin carga): 2,2Vrms (no balanceado), 3,9Vrms (balanceado)
  • CPU 8 núcleos.
  • Doble DAC AKM4497EQ
  • Wifi/ Bluetooth v 4.1 (aptX HD)
  • Firmware actualizable vía OTA.
  • Impedancia de salida: 2 ohm (no balanceada), 1 ohm (balanceada)
  • Batería 3400mAh, 3,7V. Tiempo de carga 2h y duración de hasta 12h.
  • Memoria interna 256gb, ampliable mediante slot micro-SD hasta 400gb más.
  • Para más especificaciones, aquí.

El sonido

El SP1000 refleja muy bien el sonido de la casa, y es sin duda un perfecto representante como «flagship».

Quien no esté acostumbrado a este tipo de DAPs ni haya probado con anterioridad otro modelo de la marca, se sorprenderá por la amplitud y extensión del sonido, que parece provenir de un equipo estacionario.

Creo que Astell&Kern ha seguido una clara línea evolutiva desde el AK240, el cual representaba un sonido más pequeño e intimista. El AK380 fue un DAP de gran éxito, con un sonido más espacioso y quizás más efectista también, que pronto caló en el sector audiófilo portátil, colocándose hasta ahora en el top 3 de los reproductores más codiciados.

A pesar de que el SP1000 no es un reemplazo del AK380 como apuntaba unas líneas más arriba; sí lo considero mejor en todos los aspectos.

Partiendo de una base más neutra que el AK380 sin duda, este nuevo DAP de la marca nipona suena más claro, tiene más extensión y resulta más preciso.

Quizás no contente al 100% a aquellos amantes del sonido con mucho cuerpo y cálido, puesto que el «tuning» del sonido de este reproductor va más hacia una dirección audiófila, con alto nivel de detalle y mucho aire, algo que lo hace sonar un poco más «fino» que por ejemplo el flagship de Sony. No obstante todo depende del auricular con el que se asocie, y en ningún momento he notado falta de cuerpo ni contundencia cuando es necesaria, sobre todo usando la salida balanceada que en este caso si es considerablemente mejor que la normal, y he de confesar que es el primer reproductor de esta marca en el que lo noto de manera tan clara.

Una de las características que más aprecio en un DAP de gama alta es la capacidad de separación instrumental, y la de dividir el sonido por capas, haciéndonos creer de que estamos ante algo que viene de una fuente mucho más grande y elaborada, no de algo que nos cabe en la palma de la mano. En este plano el SP1000 está sin duda en lo más alto. Si bien son características más evidentes en un auricular, todo reproductor pone su grano de arena para alcanzar el resultado óptimo. El conjunto de filtros que cada marca selecciona, operacionales e incluso la correcta alimentación del circuito (algo que pocas veces se suele nombrar pero es de lo más importante) hace que las señales se traten de manera distinta, y que al final existan ciertos aspectos que no son del todo medibles, pero sí son apreciables en una audición. Por eso en todo departamento de diseño hay una parte de testado «a oreja», y nada se deja al azar, por muy bien que mida si el resultado no gusta, se vuelve a la tabla de diseño (en este caso programas de diseño de circuitos). Hace poco confirmaba esto con un ex-empleado de una de las marcas más importantes de amplificadores para altavoces.

Siendo la gama de frecuencias abarcada muy amplia no pierde la linealidad en su respuesta, por lo tanto no es un sonido fatigante, consiguiendo un perfecto equilibrio.

El grave es seco, con la pegada justa, y sin artificios. No tiene la profundidad del Lotoo Paw Gold y se sitúa más bien en el lado sutil en cuanto a prominencia, pero a cambio ofrece una rapidez sobresaliente, lo que ayuda a crear una dinámica muy apropiada para todo tipo de géneros, incluso los más exigentes en cuanto a transitorios. Añadiendo el auricular adecuado tendremos un conjunto que es capaz de digerir cualquier tipo de música, sin aparente esfuerzo, ni dar la sensación de que por muchos que sean los instrumentos a sonar de manera simultánea, el sonido pierda en nitidez.

A pesar de que no es el chip DAC lo que más tiene impacto en el sonido, como sí lo es la parte de amplificación que va seguida, todos los productos que optan por la elección de AKM ofrecen un timbre muy convincente, y sin duda en el SP1000 esto también está presente.

Los medios son los que hacen cobrar vida a la música, y este DAP los reproduce de manera fiel, neutral y con una buena sensación de realismo, alejándose bastante de lo digital. Es cierto que en general los reproductores de esta marca tienden un poco al lado efectista, sobre todo al enfatizar los ecos de las voces y reverberaciones (debido a los distintos filtros), que en el SP1000 siguen estando pero lo hacen de una manera mucho mejor empastada. Esto vuelve el sonido más rico, y en los álbumes mejor grabados se torna en una explosión de detalles.

En cuanto a agudos es el DAP de Astell&Kern que da la sensación de extenderse mucho, lo hace incluso de manera más clara que el AK380, el cual ofrecía una respuesta un punto cálida en general. No es una diferencia de día y noche en cuanto al salto de calidad entre ambos DAPs, pero sí existe un mayor refinamiento y un plus de resolución apreciable.

Probablemente si ya eres poseedor de un AK380 la inversión estaría más sensatamente dirigida hacia un «upgrade» de auriculares, pero por otro lado si buscas tener lo mejor de Astell&Kern el SP1000 es la elección directa más lógica.

Quizás no cuente con la impedancia de salida más baja, ni con la máxima potencia para orejeros, pero a cambio cuenta con un absoluto silencio de fondo, sea cual sea el auricular y tampoco he notado deficiencias en la respuesta de iems multidriver, incluso aquellos más delicados en cuanto a exigencias con la fuente.

No es el repro que vaya dirigido a aquellos que busquen la máxima relación potencia/precio, ni tampoco lo busca. Es un producto más selecto y orientado hacia un mercado muy concreto.

El A&Ultima SP1000 como centro de tu reproducción musical

Adquirir un DAP de esta categoría y repleto de funciones para solo limitarlo a la reproducción con auriculares directamente conectados sería un tanto infravalorarlo. El SP1000 cobra más sentido y empieza a justificar más su precio cuando lo utilizamos como una parte importante de nuestro sistema.

La función USB DAC hace que podamos convertir el sonido deficiente de cualquier ordenador en un conjunto de bastante nivel, para iems y auriculares orejeros. He de confesar que prefiero el rendimiento cuando se reproducen los archivos desde la memoria interna sobre el USB, ya que ofrecen un sonido algo más natural, pero aun así el conjunto no defraudará a nadie, además de soportar todo tipo de formatos.

En caso de quererlo utilizar como transporte, la típica salida óptica de Astell&Kern hará las delicias para cualquier poseedor de los Chord Hugo 2 o compañía, esto dará un poco más de margen para mover orejeros más exigentes, y todo ello manteniéndonos libres de cables de alimentación en todo momento.

Como gran marca que es, el soporte de accesorios es importante, e incluso podremos aprovechar el line out balanceado con un cable específico acabado en conectores XLR, para así hacer uso de nuestro amplificador estacionario balanceado, bien sea en un equipo de auriculares o de cajas.

Todo ello convierten al SP1000 en algo más que un DAP, más bien en un pequeño centro multitarea para la reproducción musical. Todo acompañado del lujo de su construcción y la rapidez de su interfaz.

Conclusiones

Muchos podrán opinar que es un DAP muy caro, e incluso algo ostentoso. Desde lejos es difícil juzgarlo, y recomiendo a todos esos que lo prueben.

El SP1000 no es un reproductor para todo el mundo, al igual que tampoco lo es un Rolex. No solo es sonido, es diseño, sensaciones y prestigio de marca. Con todo esto creo que será por un tiempo un DAP de referencia para muchas otras marcas, como casi siempre lo ha sido Astell&Kern.

El continuo soporte de actualizaciones de software nos garantizan que a poco que lo cuidemos en 4 o 5 años este reproductor seguirá siendo perfectamente utilizable, y sonará igual de bien que a día de hoy. Y esto es algo que no se le puede atribuir a todas las marcas.

Es el lujo en el audio portátil personificado, si merece la pena hacer el desembolso o no es ya una cuestión de cada uno. Lo que está claro es que no dejará indiferente a nadie y se convertirá en el deseo oculto de muchos…

Puntuaciones

Diseño y construcción 97 Ptos
Funciones y batería 89 Ptos
Sonido 94 Ptos
TOTAL 93 Ptos

*Equipo utilizado para la valoración: Vision Ears VE6 X-control, Mr. Speakers AEON Flow, Noble Kaiser Encore, iBasso IT01, Oriveti New Primacy, Sennheiser HD800S.

*Agradecimientos especiales a mi chica, por aguantar como una campeona casi 400g de cobre para las fotos

Translate »